Probablemente conoces la ingeniería civil por las grandes obras que todos sabemos que involucran el trabajo de estos profesionistas, entre ellas puentes, túneles, ferrocarriles, edificios, carreteras, represas, puertos y aeropuertos; pero quienes se titulan de la Licenciatura en Ingeniería Civil también cumplen funciones menos conocidas y que desarrollan en situaciones especiales.
Ingeniería civil en la historia
La ingeniería civil es la segunda rama más antigua de la ingeniería, después de la ingeniería militar. El nombre de “civil” se le dio para diferenciar las tareas de ejecución de obras destinadas al beneficio de los civiles (vivienda, transporte, salud, etc.) de las que estaban destinadas a obtener la ventaja militar (artillería, balística, construcción de defensas y calzadas) en una situación de combate de los antiguos imperios que dominaban Europa, principalmente el Imperio Romano.
La escuela de ingeniería civil más antigua en el mundo está en París, Francia. Fue fundada en 1747 con el nombre “Escuela Nacional de Puentes y Caminos” y actualmente tiene como nombre “Escuela Nacional de Puentes ParisTech”. Hasta su fundación y la de otras instituciones, las funciones de ingenieros y arquitectos frecuentemente eran intercambiadas, puesto que no existía una distinción precisa.
Algunas de las funciones menos conocidas de los ingenieros civiles
- El ingeniero civil en la evaluación de riesgos
La experiencia de los ingenieros civiles en el desarrollo de estructuras y el dominio que tienen de las características de las obras hacen de ellos profesionistas ideales para trabajar en la evaluación de riesgos cuando una edificación resulta afectada por un desastre natural, como un terremoto, una inundación, un huracán y otros eventos que ocasionen el derrumbe de estructuras o las afecten de forma significativa.
La opinión de los ingenieros tras evaluar el estado de los materiales y las condiciones de la construcción es fundamental para que las autoridades decidan si, después de un evento de este tipo, el ingreso de personas y la habitabilidad de la edificación son viables.
Evidentemente, el trabajo principal de los ingenieros es hacer los cálculos y consideraciones necesarias para que una estructura construida no sufra daños, o se reduzcan al mínimo, en casos de eventos catastróficos. Sin embargo, la misma experiencia que los capacita para garantizar que una construcción cumpla los estándares de calidad y seguridad necesarios, les permite determinar el grado de afectación que restringe el uso regular tras un desastre natural.
En ese contexto, han surgido algunas menciones y especializaciones como la ingeniería sísmica, en la que los profesionistas se especializan en definir los requisitos que una construcción debe cumplir para que su estabilidad en caso de sismos esté garantizada, o la ingeniería hidráulica, en la que los cálculos se realizan para determinar que el peso, presión o temperatura de agua u otros químicos no lleven al punto de falla los sistemas y materiales utilizados en una obra de construcción.
- El ingeniero civil como especificador
Otra función que posiblemente no conoces de un ingeniero civil es su labor como especificador. Esta se da cuando el ingeniero trabaja como consultor independiente o como parte de una firma consultora que hace recomendaciones a los constructores sobre el uso de determinados materiales en una obra para garantizar el funcionamiento correcto, la seguridad y el menor número de fallas posible.
Para llevar a cabo esta labor, un ingeniero civil debe conocer las propiedades y capacidades de los materiales, su disponibilidad, costo y las normas que cumple, para así hacer la especificación requerida cuando una empresa constructora le asigna la tarea de evaluar las mejores opciones para llevar a cabo un proyecto.
- El ingeniero civil y el cálculo de cargas
Más allá de hacer los cálculos para la construcción de estructuras, el ingeniero civil está involucrado en la determinación de los límites a los que puede ser sometida una edificación. Tomando en cuenta que para una construcción puede ser beneficiosa la flexibilidad en diferentes sentidos, este tipo de decisiones conocidas como cálculo de cargas dependen de los ingenieros. Podemos enlistar algunos casos:
- La capacidad de un edificio para inclinarse parcialmente en terrenos sísmicos.
- La flexibilidad de la estructura de un puente ante la fuerza del viento y la tensión que sus materiales pueden resistir.
- La capacidad de la estructura en el techo de un túnel para resistir el peso encima.
- La resistencia que debe tener una bóveda para que la estructura no se desplome.
- El grosor del material en obras destinadas a vías de tránsito, o en aeropuertos donde serán utilizadas grandes aeronaves que incrementan la fuerza generada por el roce en un aterrizaje.
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